Casi un centenar de árboles caídos y dañados, algunos de gran porte, como ejemplares de roble de más de 30 años, no resistieron la fuerza de los elementos.

El mayor daño se verificó en la zona de las piletas cerradas del complejo municipal, cuya estructura de techo fue dañada en más del 60%.

También quedó destrozado el salón multiuso de entretenimientos, que se construyera dos años atrás. En este caso, las chapas de zinc del techo fueron arrancadas y volaron más de 50 metros, ubicándose las mismas, varias horas después dentro de las instalaciones del spa termal.

La tormenta  surgió de forma tan repentina, que el funcionario que cumplía su tarea en una de las torretas de vigilancia de guardavidas, en ese momento, no pudo descender a tiempo, cayendo dentro de la misma estructura. Afortunadamente no sufrió lesiones, como tampoco las sufrieron ninguno de los casi 400 turistas que se encontraba en el parque al momento del fenómeno climático.

Para prevenir daños mayores, en el acto se dispuso la inmediata clausura de las instalaciones, el corte del suministro de energía eléctrica, mientras se ponía en marcha un operativo de emergencia para evacuar el parque. Dicho operativo contó con el apoyo del personal de la Sub Comisaría de Daymán que supervisó la salida de los turistas y su traslado a la ciudad de Salto o a los respectivos hoteles de la zona.

El lunes, jerarquías de los Departamentos de Obras, Servicios Públicos y Turismo, realizaron una recorrida para evaluar los daños y comenzar las tareas de reconstrucción. Hay medio centenar de funcionarios municipales trabajando en la recuperación del predio termal.

Se informa que el parque permanecerá cerrado, como mínimo hasta el día Jueves 3 de Diciembre. Se prevé su reapertura para el viernes 4, a fin de cubrir la demanda del fin de semana.

Quizás algunas áreas permanezcan cerradas y para el próximo fin de semana, se expenderán un máximo de 1.200 entradas diarias a efectos de garantizar la mejor atención, ante la disminuición de la capacidad locativa.

Volaron las chapas del techo de los quinchos

Torreta del guardavidas con el funcionario adentro, tuvo la caída amortiguada

Tampoco se salvaron los lockers

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