Aunque al nombrarla se nos viene a la mente la imagen de extensas playas, también hay importantes centros de esquí.
En uno de ellos, en Mount Ruapehu, un volcán activo en la isla norte del país, un instructor de esquí canadiense especializado en iglúes ha construido uno con dos zonas adaptadas como bar donde se puede almorzar y cenar y tres habitaciones para que como máximo nueve personas puedan pasar allí la noche.
Los huéspedes interesados tendrán que darse prisa pues en octubre comenzará a derretirse.
Vía | Gadling
fuente:diariodelviajero.com