La idea es del empresario sueco Oscar Diös que, ante las dificultades para comprar un terreno y edificar, en 2006 compró un avión de una compañía en quiebra que había sido destinado a chatarra.
La idea no es un hotel de lujo sino un servicio a miles de viajeros. A pesar de las trabas, tuvo muchas, este empresario ha logrado finalmente poder abrir su original hotel.
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El hostel cuenta con 25 habitaciones de diferentes categorías y algunas suites -una en la cabina- dotadas con baño privado y vistas a las pistas del aeropuerto de Arlanda.
El "establecimiento hotelero" dispone de una cafetería en el segundo piso. Ha sido concebido como alojamiento del aeropuerto Arlanda, en el que turistas y viajeros pueden alojarse.
La mayoría de las habitaciones tienen baños y duchas compartidas, sólo las suites de la parte superior tienen más intimidad. Todas tienen aire acondicionado, WiFi y televisión. Cada habitación, que será compartida, tiene espacio para tres camas.
La idea del propietario no es hacer un hotel lujoso, sino un establecimiento que dé servicio a los miles de viajeros que cada día pasan por el aeropuerto de Estocolmo y que a veces necesitan pernoctar.
Fuente: 20Minutos.Es