En lo que llevamos de año, se han producido una gran cantidad de cancelaciones de rutas aéreas comerciales siendo la última la que une Madrid con Gibraltar, que operaba Iberia y que no ha llegado ni siquiera a los dos años de vida.

Según los últimos datos de tráfico aéreo de Iberia, éste cayó un 1,5% en agosto, teóricamente uno de los meses más fuertes para la compañía. Además, la compañía redujo la ocupación de sus vuelos en un 0,9% hasta el 80,8%.

Spanair es la empresa que lidera el ranking de rutas canceladas, la filial de SAS se ha visto obligada a suspender nueve trayectos como consecuencia de su plan de viabilidad.

El fracasado intento de venta de la compañía obligó a que se tomaran  medidas urgentes,la primera, la de dejar en tierra 15 aviones por el alto costo del combustible.

También cancelar las rutas "deficitarias"  entre Madrid-Barajas y Munich, Gerona, San Sebastián, Granada y Oviedo, así como los enlaces Barcelona-Zurich, Bilbao-Málaga y Bilbao-Jerez.

Las malas perspectivas del sector aéreo, que según la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA) prevé que cierre 2008 con unas pérdidas de 3.700 millones de euros, también se trasladan a las compañías de bajo costo.

El precio del petróleo, un 30% más caro que hace un año, unido a que el tráfico de pasajeros sufre una desaceleración contínua, ha hecho insalvables las dificultades para rentabilizar estos vuelos.

Easyjet cerró su base de Asturias, tras cancelar las rutas Asturias-Madrid y Asturias-Ginebra. Aún así, la aerolínea incrementó el número de pasajeros transportados en septiembre en un 22,1% hasta los 4,1 millones de euros.

Redacción Portal del Uruguay
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