El Quinto Foro Internacional de Turismo para Parlamentarios y Autoridades locales, celebrado en Túnez, ha establecido esta conclusión en la Declaración de Hammamet de 2007.
 

Este foro internacional reunió la pasada semana a más de 300 representantes de 95 países, que analizaron la influencia del turismo y cómo éste puede colaborar con las instituciones en programas tanto económicos como sociales, culturales y ambientales. El documento asegura que el turismo trasciende las diferencias políticas e ideológicas, favoreciendo las bases para el diálogo y que su crecimiento, tanto en la vertiente de negocios como en la vacacional, está ayudando a la evolución de las sociedades y, en especial, a los países en vías de desarrollo.

El crecimiento de un 6% mantenido durante los últimos 50 años se ha ido moderando y se mantiene en torno al 4%, lo que es, según esta declaración, signo de su madurez. Pero esto también implica responsabilidad de los sectores público y privado de las comunidades, favoreciendo la descentralización que aconseja la Organización Mundial del Turismo (OMT).

La Declaración de Hammamet señala el papel del turismo ante dos grandes retos: las bolsas de extrema pobreza y el cambio climático. La industria turística y los consumidores, dice, deben reconducirse para que todos desarrollen prácticas responsables y contribuyendo con sinergias al comportamiento del resto de los sectores económicos.

El Quinto Foro Internacional de Turismo para Parlamentarios y Autoridades locales ha sido organizado con la colaboración de la OMT y el patrocinio de la República de Túnez.

Ángeles Vargas (Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.)