se celebraba, con una cena en el hotel Conrad, el centenario del principal balneario uruguayo. En la reunión -el acto central de una serie de eventos conmemorativos-, organizada por la Liga de Fomento de la ciudad, de la que participaron cerca de 1.500 personas, se nombraron a la princesa Laetitia D'Aaremberg, al Contador Enrique Iglesias y a Carlos Páez Vilaró como madrina y padrinos del balneario. "Me están premiando por haber sido feliz en Punta del Este", fueron las primeras palabras del Páez Vilaró al recibir la distinción.

A su vez, se hizo entrega de las llaves de la ciudad al multimillonario empresario brasileño Alexander Grendene, famoso por sus fastuosas fiestas que, junto a las de su compatriota Gilberto Scarpa, marcaron una toda una época en la Punta.

Esta distinción, en realidad, estaba pensada para Gerardo Sofovich que, de acuerdo a la fragmentada información que se dio, faltó sin aviso, lo que motivó la molestia y el cambio que a último momento decidió dar la comisión organizadora, cuyos integrantes tampoco pudieron dar una explicación certera de las ausencias de Susana Giménez, Mirtha Legrand, Antonio Gasalla, Carlos Perciavalle y Marcelo Tinelli, entre otras estrellas del espectáculo muy ligadas a Punta del Este, que también fueron invitadas y que no concurrieron a la cita.

Los presentadores Víctor Hugo Morales y Victoria Rodríguez (conductora de la televisión uruguaya) anunciaron diversas distinciones para gente y entidades con renombre y otros desconocidos que, en sus distintos rubros, colaboraron en forjar lo que es hoy Punta del Este. Así se premió, por ejemplo, al primer taxista que tuvo el balneario, al Yacht Club Punta del Este, y al historiador Fernando Cairo, autor del libro de los 100 años de Punta del Este, por nombrar sólo algunos de los más de veinte reconocimientos que se hicieron.

En la celebración estuvieron presentes la plana mayor del gobierno uruguayo (a excepción del presidente Tabaré Vázquez) empresarios, operadores turísticos, periodistas y representantes políticos de destinos turísticos de América y de Europa. Entre ellos se destacó la figura del intendente de Mar del Plata, Daniel Katz, quien aprovechó la visita para firmar junto al intendente de Maldonado, Oscar De los Santos, un acuerdo de hermandad. "Este acuerdo, más allá de ser algo declamativo, plantea acciones muy concretas para trabajar en forma complementaria", dijo Katz a Clarín. Katz detalló algunas acciones que Punta del Este y Mar del Plata van a comenzar en breve a desarrollar juntas: "Iniciaremos los contactos para traer una regata internacional que tocará las dos ciudades; iremos juntos a la IRB (International Rugby Board) a recuperar para Mar del Plata y Punta del Este las fechas internacionales del circuito de seven; y concurriremos a las ferias internacionales, a vender el paquete conjunto".

La presencia de Katz, intendente de una ciudad que junto a Pinamar son miradas en Uruguay como "competidoras", fue bien vista por el espectro político uruguayo, en este momento en que, a causa de la construcción de las pasteras, las relaciones entre ambos países son tensas. El propio vicepresidente de Uruguay, Rodolfo Nin Novoa, y el Ministro de Turismo, Héctor Lescano, le agradecieron a Katz su presencia.