Sinceramente, lamentamos nuestro acierto. A lo sumo, podemos decir que nuestro pronóstico, falló por unos pocos días. Hablamos que se venía un "setiembre negro" y la cosa estalló en agosto.
Hablábamos de setiembre porque el pacto de "no innovar" acordado entre la empresa y Otau Ofp, vencía el 13 del mes próximo.
En la presente jornada, habrá una nueva instancia de la tripartita, a la hora 11 más precisamente. Es casi un hecho que el sindicato mayoritario, la Otau Ofp, se retire de la negociación.
Cuando nosotros insistimos una y otra vez, advirtiendo el gran error de dejar para atrás las negociaciones con los funcionarios, sabíamos muy bien lo que decíamos. Contar con el apoyo de los funcionarios, era la pata más importante del taburete de Leadgate y esa pata, está quebrada y a punto de venirse al piso.
Por encima de si Boeing o Bombardier; de si Madrid todos los días y la Categoría 1 para volar a USA, de si se logra ser hub de la región o no; de si se quintuplica la facturación y si se consigue facturar por cargas cien millones, EL PATRIMONIO MÁS IMPORTANTE QUE TUVO Y TIENE PLUNA, a pesar de todos los pesares, que se pueda argumentar hasta con razón, que también es su Talón de Aquiles, es sin dudas, el Capital Recursos Humanos.
Y no nos referimos a otra cosa que a la directa incidencia que tienen los recursos humanos de PLUNA con la seguridad de PLUNA.
La seguridad es el valor agregado de PLUNA en la región y la ha convertido, en una de las pocas excepciones mundiales; la seguridad de PLUNA, además de (como también lo hemos dicho)contar a Dios como parte integrante del staff, se debe pura y exclusivamente a la gente que integra PLUNA en todos los sectores.
Nadie está anunciando que se pueda hacer nada en contra de la seguridad como resultancia de diferendos empresa-funcionarios; pero lo que si, se puede decir, sin temor a equivocarse es que: resquebrajar el estado de cosas, como inexorablemente está aconteciendo y va a seguir ocurriendo, es lisa y llanamente, atentar contra la seguridad.
Esa era nuestra preocupación desde el inicio de la nueva Sociedad Anónima; por eso insistimos tanto con el olvido de negociar con los gremios.
Esperamos equivocarnos pero, creemos que se ha entrado en un proceso irreversible y si, ambas partes, empresa y sindicatos, no ponen la pelota debajo del pie y de una buena vez, discuten y acuerdan hasta que las velas ardan, este conflicto puede llegar a ser decisivo en la suerte de la aerolínea.Nos vemos.