piloteada como pudo, por el gobierno de Tabaré Vázquez, se estaría ante un eventual acuerdo y aparente cese de hostilidades.
Es muy difícil aventurar pronósticos, aún más, si como en nuestro caso, no somos analistas políticos y tampoco, desplegamos ninuguna estrategia de investigación al respecto.
Utilizando el lenguaje aerocomercial, podemos decir que manejamos este tema "por instrumentos"; son ellos, los diversos medios, los trascendidos, las declaraciones.
Nos detenemos en dos datos de la realidad: el primero: durante la campaña electoral, la presidenta electa, Cristina Fernández, demostró que no solamente tiene buena cintura física, posee la política también y en ningún momento, se manifestó con claridad sobre su postura ante el tema Botnia. El otro, el sorpresivo compás de espera aceptado por Vázquez a pedido del Rey Juan Carlos.
De esta forma entonces, arriesgamos nuestro parecer: desde la Cumbre Iberoamericana, desde lares trasandinos, deben llegar, en las próximas horas, buenas noticias.
Si ello no ocurre, estaríamos definitivamente ante una auténtica payasada rioplatense.
Si debemos enfrentar una nueva temporada estival con puentes bloqueados, habrá que revisar concienzudamente, reveer en toda su extensión, el relacionamiento con el gobierno argentino.
Decimos claramente: "el relacionamiento con el gobierno argentino", el que involucra al pueblo argentino, nunca estuvo en tela de juicio; como siempre ocurre, la inmensa mayoría de los argentinos, se ha manifestado desde el comienzo a favor de la histórica hermandad. Nos vemos.