por Miguel BardesioBuenísima", "explota", "la mejor en los últimos diez años". Así hablan muchos operadores sobre la temporada que empieza en Punta del Este. Así la espera Juan José, un argentino de 26 años que puso un aviso en Internet buscando un trabajo que le dé para todo el verano. Como él, miles y miles de uruguayos y
extranjeros, trabajadores, empresarios o artistas, aguardan el boom de la península. Y da para entusiasmarse. Los 120 hoteles de Punta del Este (11.000 camas), están con una ocupación del 95% hasta el 31 de enero y la subsecretaria de Turismo, Liliam Kechichián, auguró que este año cerraría con ingreso récord: 750 millones de dólares. En noviembre, último dato del Ministerio de Turismo, entraron a Uruguay 132.000 extranjeros, 12% más que el año pasado porque la temporada se adelanta y deja cajas más gordas con turistas de alto poder adquisitivo.
Pero siempre hay un "pero" o más bien dos. Los alquileres (80.000 camas) no marchan muy bien. El IRPF aplicó un impuesto del 10,5% y según Luis Borsari, empresario inmobiliario y presidente de la Corporación Uruguaya de Turismo, el régimen dejó al 80% de la oferta inmobiliaria en el mercado informal y sin dato. Lo formal va de a poco reservándose a uruguayos y en especial a veraneantes argentinos medios, complicados por diferencias en el cambio de moneda y el segundo año de puentes cortados. Ellos, que siempre aportan volumen a Punta, no vendrían en masa.
La segunda mala noticia es que más allá del 15 de enero la afluencia decae. Contra eso y los demás obstáculos, los operadores anuncian cientos de espectáculos, lanzamientos, fiestas y desfiles desde diciembre a marzo. Un glamour pocas veces visto en Punta.
Para muestra, dos botones. El 12 de enero se hará Creamfields, la fiesta electrónica más importante del mundo. Y en enero, dan por seguro que Shakira se casará con Antonio de la Rúa en su chacra La Colorada, de José Ignacio. Será la noticia del verano con una lista de invitados de primer nivel y repercusión planetaria. La boda es el mejor regalo del destino para Punta y sólo queda pedir a la divinidad que mantenga soleado el clima durante la temporada.
SHOWROOMS. En el fondo, sin embargo, Punta del Este atraviesa por un proceso único de consolidación como destino mundial, más allá de coyunturas económicas o climáticas. Todos los días se escuchan cifras de inversiones de hasta seis o siete ceros. El argentino Eduardo Constantini compró cientos de hectáreas cerca de Laguna Garzón por 30 millones de dólares y haría un complejo de chacras marinas. Cerca, el cubano estadounidense Jorge Pérez y el arquitecto Enrique Etchebarne preparan Laguna Escondida, enorme complejo con hotel cinco estrellas incluido. El arquitecto Carlos Ott construye una mega casa en José Ignacio para un noruego de apellido Vic. La obra incluye un techo de titanio. Así la lista sigue, con el español Julio Iglesias incluido.
El 28 de diciembre no será un día más: se prevé la inauguración de Acqua, un super edificio en la parada 19 de la Brava. Diseñado por el arquitecto Rafael Vignoly, es la construcción más premium del país, con apartamentos de hasta seis millones de dólares y de ellos, algunos ya están vendidos. Otros 27 emprendimientos inmobiliarios están listos para lanzarse en la temporada. En total, unas 4.000 unidades (casas, apartamentos, chacras) están en construcción por lo que será un verano de showrooms, lanzamientos y fiestas vinculadas a la propiedad. El objetivo: que el turista se instale. El precio: unos 3.000 dólares el metro cuadrado en promedio.
MOVIDA TOP. "Punta del Este se consolida como destino internacional", dice Marcos Grolero, director de Marketing de la revista Caras Uruguay. La temporada pasada, 241.000 personas visitaron el balneario, según los números del Ministerio de Turismo. Tal vez no suba la afluencia, pero habrá más divisas porque llegan más visitantes con mayor poder adquisitivo.
Y el dinero trae famosos y los famosos traen gente que trae dinero. Verónica, una artesana de José Ignacio, recibe todos los días de verano las mismas preguntas: "¿está Mirtha?, ¿está Tinelli?, ¿Y Susana?..." Así hasta cien veces por jornada. Para esa movida farandulera, la temporada 2008 se viene con una novedad fuertísima. Caras Uruguay, Argentina y Brasil ganaron la licitación y construyen dos paradores en la isla Gorriti; 200.000 dólares de inversión, según informó Martín Rodríguez, editor de la versión nacional. Por allí desfilarán decenas de figuras de los tres países para producciones fotográficas de la revista, aunque por ahora Rodríguez no larga nombres. "Hay que aclarar, igual, que no será una movida cerrada. La gente podrá ir y pasar todo el día ahí", acota Grolero.
La competidora Gente estará en Montoya, Intrusos tendrán móviles, igual que Los profesionales. Cientos de paparazzis afilan las cámaras para rondar por todo el balneario. Y hasta Fox Sport hará un programa diario en vivo desde el Parador del Hotel Mantra. Conducirá Iván de Pineda y se llamará Verano Sports.
FIESTAS. Gente demanda fiestas, más abiertas o cerradas. Como nunca antes, ya hoy (16 de diciembre) hay varios RR.PP. uruguayos y argentinos instalados en Punta, organizando celebraciones de Navidad y en especial de año nuevo. Alan Oks es uno de ellos. Reside en Nueva York y prepara varias veladas nocturnas para el inversor habitué Giuseppe Cipriani, por ejemplo, o otra para mega empresarios brasileños.
Alfredo Etchegaray se instala en José Ignacio y organizará fiestas para europeos, canadienses, estadounidenses y hasta personalidades de Emiratos Árabes. Él, que sabe de estas cosas, conoce varios eventos privados que se harán en Punta; algunos donde - por ejemplo - se servirá un champagne de 1.000 dólares la botella. El RR.PP. Julio "el Colo" Wolman también está organizando decenas de fiestas y pronto para instalarse en Punta del Este.
Las marcas, cuya presencia se incrementa este verano (ver página 5) también montan varios festejos. El canal E! Entertaiment prepara una fiesta, aún sin fecha ni lugar confirmado. Lacoste (28 de diciembre en La Huella), Baccardi, Freixenet, Luis Vuitton, Movistar, Personal, Conrad, Mantra y muchas otras empresas ajustan los detalles para tirar el verano por la ventana.
Encima, Carlos Páez Vilaró cumple 50 años de su llegada a Punta Ballena y se planea un festejo para conmemorarlo en Casa Pueblo.
TIENDAS PLURALES. Antes de la Navidad, abrirá en Manantiales la casa de decoración Maison de Famille Sur Mer, una marca con sede en París y que acá lanzan las emprendedoras brasileñas Inguelore Scheunemann y Clarice Iepsen. Ambas instaladas en Punta del Este, sueñan con quedarse a vivir todo el año. La novedad habla de la creciente presencia brasileña ("Todas mis amigas y clientas están acá", dice Clarice) y del crecimiento gigante de la construcción que debe vestirse. Como Maison, otras casas de diseño abrirán en toda la costa de Punta Ballena a José Ignacio.
En La Barra y alrededores, sin embargo, las tiendas se están convirtiendo en "multipropósito", lo último en tendencia comercial. En Maison, por ejemplo, Inguelore explicó que habrá una terraza con sillones para tomar el té o comer algo. "No es un restaurante, más bien un espacio para compartir con los clientes y conversar. No sólo nos interesa vender, sino conocer a las personas y aconsejarlas para que elijan la mejor decoración", dice.
Diablito Records repite temporada en La Barra como disquería, bar, tienda de ropa y accesorios. Así muchas le seguirán, como pasa en la Plaza Serrano de Buenos Aires, donde las casas de moda son también de decoración y boliches; una propuesta para quedarse el día y la noche.
Del otro lado de Punta, La Pataia ha cambiado de dueño. Laetitia D`Arenberg tomó las riendas y amplió el restaurante, la cafetería, el tambo, el establo de cabras y el almacén de los productos típicos. También para quedarse largas horas y con gran agenda de espectáculos, para grandes y chicos.
Juan José, el argentino de 26 años, explica por qué quiere trabajar en Punta: "Tengo el sueño de progresar, y me parece que por el alto nivel de Punta del Este sería una puerta nueva que se abriría para el futuro".
fuente: elpais.com.uy
(Producción: Marcelo Gallardo, Gabriela Vaz y Magdalena Herrera).