La más difundida, que Gonzalo Pascual y Gerardo Díaz Ferrán, dueños del Grupo Marsans y por ende accionistas mayoritarios de Aerolíneas Argentinas, se habrían reunido en Casa de Gobierno con Cristina Fernández de Kirchner y Alberto Fernández, con suerte diversa.
La realidad es que tal reunión no existió y que los empresarios españoles, como lo hacen habitualmente, solo vinieron por unas horas -Díaz Ferrán llegó a la mañana y embarcó de regreso a Madrid esa misma tarde mientras que Pascual partió antes que se pusiera el sol en un avión privado a su campo en La Pampa- para apoyar lo decidido en la reunión de directorio.
La expectativa, reconocen en la empresa, está puesta ahora en ver si se cumple la promesa del gobierno de concluir marzo con los acuerdos de paz social firmados con los gremios, entre ellos obviamente APTA y APLA.
Por lo pronto el personal esta vez cobró sus sueldos en tiempo y forma aunque algunos proveedores cuestionan que los atrasos en los pagos son más pronunciados que los habituales y los pilotos se quejan de aviones que quedan varados varios días en el exterior por falta de repuestos. "En un país sin financiación, la bicicleta a los proveedores es un recurso al que se suele echar mano con demasiada frecuencia", reconocen fuentes cercanas a la empresa. Abril, entonces, parece ser el mes clave.
Mientras tanto a Jorge Pérez Tamayo, a quien en algún momento se imaginó como distanciado del líder sindical Hugo Moyano, se lo vio este martes ocupando un lugar en el palco de invitados por los festejos por los 20 años del dirigente al frente del gremio de los camioneros.
El líder de la CGT representa para muchos en la empresa y en el gobierno la llave que conduce a la tan ansiada y vapuleada paz social
fuente: Aviación News