Hace ya bastante tiempo nos había dado pena el giro hacia el oficialismo de esta revista; lo lamentamos pues como asiduos lectores, perdíamos la posibilidad semanal de informarnos sin preocuparnos de leer entrelíneas.
En la parte central de la nota del viernes, Caras y Caretas dice:"¿Dónde está la mano negra? ¿Dónde se debería buscar el socio que permitiera salvar a Pluna? ¿Era posible encontrar un socio que no fuera millonario y que no fuera extranjero? ¿Que hay que hacer cuando el Estado pierde 15 millones de dólares por año y no es posible revertir la situación? ¿Alguno de los críticos tenía alguna solución mejor ? ¿ Porqué no la sugiere? ¿Quien piensa que hay algo ilegal? ¿Cuál es el misterio ? ¿ Dónde está la turbidez? ¿Hay objeciones éticas o legales a la gestión de Rossi o Astori? ¿ Qué cochinada es la que se está sugiriendo?.
Se comete una vez más el gran error de la omnipotencia y de autoencaramarse al podio de los propietarios de la única verdad.
Hemos reiterado en varias notas nuestras que lo que nos hace respetar a este gobierno y mantener sólidas esperanzas de cambio, es precisamente, la honradez de la gente que lo integra. Nosotros no tenemos absolutamente ninguna prueba ni sospecha de falta de honradez de los ministros Rossi y Astori, por el contrario, los creemos muy honestos.
Lo que nadie nos puede asegurar, ni estos ministros, ni Grille, ni el propio presidente Vázquez, es que se hayan agotado las posibilidades de "reperfilar" a Pluna; es más, estamos casi seguros que nunca se intentó hacerlo.
Históricamente, la marcha de Pluna y lo que es peor, de la aviación comercial del Uruguay, ha transitado a impulsos de directorios ineficaces por desconocimiento del tema y también, por exigencias, muchas veces devenidas en ley, de los distintos sindicatos. Nunca hubo política aeronáutica seria y nunca se intentó poner la empresa y la aeronáutica comercial, en manos de técnicos idóneos.
En nuestro país, aunque la generalidad de los observadores (prensa incluída) no lo sepa, hay gente que tiene muy claro lo que NO HAY QUE HACER CON PLUNA Y EN LA AERONÁUITICA COMERCIAL NACIONAL y por consiguiente, tiene todos los atributos para el reperfilamiento necesario sin tener que vender, asociar o privatizar a Pluna.
El problema, es que quizás, algunos de esos técnicos, no son frenteamplistas pero, son uruguayos, son honrados a carta cabal y prestigiosos. En el marco de las promesas proselitistas se dijo más de una vez que habrían de utilizarse técnicos, fueran del partido que fueran.
Uno de los grandes problemas de la prensa uruguaya (entre muchos), es la falta de rigor y el exceso de "payadores"; un día si y el otro también, nos venimos encontrando con "fenómenos" que saben de todos los temas y editorializan desde su Olimpo y cada, jornada, para sí mismos, son más "ombligos del mundo".
Ahora preguntamos nosotros: ¿ Alguna vez, hasta ahora, algún gobierno estudió en serio el tema Pluna? ¿Alguna vez, hasta ahora, algún gobierno hizo un llamado a técnicos que presentaran algún plan para dirigir Pluna? ¿Que es lo que va a pasar con los 100 millones de dólares que dicen costaron los diferentes experimentos realizados hasta ahora, Varig incluído? ¿Quien va a controlar a quienes detentarán el 75% de las acciones de Pluna? ¿Porqué no sale nadie a desmentir a Blixen?
No es necesario ser deshonesto para equivocarse en el gobierno de un país, alcanza con no ser conocedor de algunos temas y no asesorarse como corresponde.
Suponemos, que desde nuestro llano, no llegaremos a las cimas que transitan coyunturalmente los voceros del poder y por ende, quizás ni se enteren de estas líneas; lo bueno es que no escribimos para ellos, lo hacemos para quienes eligen leer textos claros y tal vez, les sirva para pensar. Nos vemos.
Sergio Antonio Herrera
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