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Mientras tanto, en Montevideo, PLUNA informaba el mismo día que comparando los meses de abril de 2008 y 2009, el año pasado transportó 28.710 pasajeros y este año, 52.957, lo que indica un incremento del 84%.

En cualquier parte del mundo, una noticia como esta hubiese causado una conmoción, es más, no debe ser muy fácil encontrar algún porcentaje similar de crecimiento en el mundo entero, en la actual coyuntura.

Pero estamos en Uruguay y como en este país el éxito es penalizado, la noticia pasa sin pena ni gloria y no es portada de ningún medio de comunicación.

Los códigos tácitos de la uruguayez prohiben a quienes alguna vez criticaron este proceso, cambiar el discurso y reconocer aunque sea en forma parcial, algún acierto de la actual conducción de PLUNA.

¿Reitera guarismos de puntualidad?, cumple con su obligación; ¿Supera periódicamente los records de pasajeros transportados en un día?, es un dato menor; ¿Hace 22 meses que el Estado no pone dinero en PLUNA?, ¡bueno sería que pusiera!; ¿no hay problemas con los sindicatos?, eso es lo normal.

¿PLUNA es un modelo de aerolínea?, no, no estamos diciendo eso, le falta mucho aún para serlo pero, es innegable que va camino a ello.

Transita en este momento por el árido camino de rotura del cordón umbilical con el Estado uruguayo; pretende ser y funcionar como privada, aún no lo es.

Ya no es tan "cañón antiaéreo" como solía, pero alguna bala le queda, basta preguntarle a TACA, a SOL a BQB.

Aún (para nosotros), erra en algunos acuerdos como el del pasaje combinado aéreo-fluvial a Buenos Aires.

Si no fuera lo que es ya, no habría logrado alianzas estrategicas o códigos compartidos con empresas del porte de American Airlines, Iberia o TAM.

Si no fuera lo que es ya, no habría firmado el convenio con la Provincia de Chubut, no estaría "armando" el negocio con Aerovip.

Pero, como decíamos antes, estamos en Uruguay y no se puede consagrar un éxito sin antes "hacer sufrir" al exitoso.

En este contexto, nosotros, en setiembre de 2007, en absoluta soledad, optamos por apoyar este proceso "abriendo una carta de crédito a la gestión"; por ahora, hemos acertado pero, como estamos en Uruguay, apenas colguemos este editorial en la web, volverán los mails anónimos acusándonos de todo un poco.

Como estamos en Uruguay, nosotros también debemos pagar nuestro éxito en el acierto. Nos vemos.